"Freelanstrés": El estrés del freelance.

¿Freelanstrés? No, no hace falta que busques en Google... es un juego de palabras, una licencia personal, pero que creo que define y da una idea muy clara de que el estrés de los autónomos, en algunos aspectos, presenta matices algo diferentes al que puedan sufrir el resto de mortales.

Ser freelance es maravilloso, pero… su misma naturaleza puede resultar, a veces, algo estresante.

Habitualmente, cuando alguien decide emprender, es para dedicarse a aquello que le gusta, lo que se le da bien, tal vez para no tener jefes y poder organizar su negocio como le apetece, en algunos casos sin horarios y otros para trabajar desde donde quiera o para conciliar. Existen muchos tipos de autónomos y emprendedores, pero todos ellos, al comenzar, han tenido una motivación o una ilusión que les ha ayudado a dar el paso. Visto de esta forma parece el paraíso, pero ¿Por qué después puede resultar estresante?

Los “no me da la vida” y los "no doy abasto", las responsabilidades económicas, las fiscales, los clientes, las facturas y los gastos, el banco, no poder desconectar, las jornadas interminables, el teléfono… ¿Sigo? Créeme, el día a día de cualquier empresario y los retos laborales diarios a los que se enfrenta un autónomo pueden generar “muuucho” agobio.

Lo que sí está claro, y estaremos todos de acuerdo, es que sin estrés todo funciona mejor. Vivir tu vida sin esa tensión constante nos permite ser más eficientes, más creativos, relacionarnos mejor con nuestro entorno y hasta tener mayor capacidad para aprender o adaptarnos a los imprevistos, entonces ¿No vale la pena desestresarse?

Entiéndeme: un pequeño puntito de tensión no tiene por qué ser malo y puede hacer que estemos en alerta, pero ¡Ojo! Si esa tensión y estrés diarios se convierten en una rutina y no logramos que las preocupaciones y los dolores de cabeza laborales se disipen ¡Te vas a quemar!

El Burnout

Así se denomina en inglés al síndrome de desgaste profesional o de estar quemado. Como su nombre indica, es el desgaste o agotamiento provocado por un estrés laboral, que se alaaaarga tanto en el tiempo, que se convierte en crónico y que te debilita en todos los aspectos, te deja "chof", sin interés y distanciado de lo que haces y, como consecuencia, termina traduciéndose en falta de eficacia.

La mala noticia: por desgracia, el "cómo he llegado yo a esto si lo que yo quería era...", puede sucederle a cualquiera, pero en el caso de los autónomos, se convierte en un verdadero problema cuando necesita seguir a tope con su actividad, atendiendo y captando clientes, facturando...

¿Y a ti, que te desgasta?

Las causas pueden ser diversas, pero existen algunos factores determinantes que nos pueden ayudar a advertir que algo comienza a oler a quemado. Son un común denominador en la mayoría de autónomos y, que sepas, que todas ellos, a priori, pueden tener solución.

¡No te pierdas el próximo post!

En él os hablaremos de las causas más comunes por las que autónomos y emprendedores pueden sentirse estresados y de cómo, con algunos consejos y pequeños cambios, pueden intentar evitarlo o, al menos, aliviarlo.

¡Os esperamos!

Recuerda suscribirte a nuestro newsletter para ir recibiendo este y otros valiosos consejos para autónomos y emprendedores.

¡Suscribirme!